Don Omar Comparte Su Alegria Despojado De Lujos!

Abrazar el dolor de los menos afortunados es una sensación gratificante para el rapero Don Omar, ya que describe esos momentos como su mayor fortuna, más allá de la fama y el poder que goza como artista.

La tarde del lunes, el solista arribó a la Isla de manera relámpago para sorprender al niño Kevin Crespo, en el Hospital Pediátrico del Centro Médico.

A pesar de los lujos que adornaban su figura, como las gafas de sol Gucci, la polo Lacoste, un mahón de la firma True Religion Brand y los zapatos Coach, Don Omar develó su bondad para darles alegría a pacientes que como Kevin sufren de leucemia.

Pasmado y sin parar de sonreír, Kevin Crespo Vargas, de 12 años de edad, quien lleva dos meses hospitalizado, le hizo espacio en su cama al reguetonero para que se sentara a su lado, y así poder conversar.

Para romper el hielo, el intérprete de “Dale, Don, Dale” le comentó al chiquillo que “se ve que eres el rey de la casa y esos cachetitos lo dicen todo. Tú eres una bendición para nosotros”.

Don Omar, asimismo, sorprendió al pequeño al regalarle una guagua control remoto, la que sacó de la caja, le puso las baterías y guió por el piso de la habitación. Y jugando con su imaginación, la estacionó cerca de los pies del niño que sólo sonreía por no creer lo que estaba viviendo.

Para esta visita, el rapero estuvo acompañado de Miss Mundo de Puerto Rico 2007, Jennifer Guevara, quien también se mostró cariñosa y atenta con el pequeño, a quien se le sentó también en una esquinita de la cama.

Un tanto jocoso el reguetonero le preguntó a Kevin: “¿Tú eres desesperado para abrir los regalos?”. Seguido, el pequeño le respondió de manera afirmativa con el movimiento de su cabeza, ya que casi no habló por lo emocionado que se encontraba.

Entonces, Don Omar le dijo: “Pues, yo sí soy desesperado, máxime cuando venía Santa Claus, cuando yo era niño”.

Con su aire filosófico, el exponente de reguetón le narró en forma de cuento que “conocí a un caballero del que habla la historia, que pasó 40 días y 40 noches en un sitio solo sin gente ni nada. Sintió las tentaciones más grandes y los dolores también. Se desprendió de su cuerpo”.

“¿Sabes quién es?”, preguntó al jovencito, quien observándole le dijo que no. En tanto, el solista con cariño le explicó que “ese es Jesucristo, que estuvo en el desierto y se convirtió en el puente de la gente como tú y como yo”.

Kevin Crespo Vargas reveló tímidamente a PRIMERA HORA ser admirador “número uno” de Don Omar. Dijo que le fascinan las canciones “Angelito”, “Dile” y “Vuelve”, por lo que Don Omar le sorprendió también con sus discos “The Last Don”, “King of Kings: Armageddon”, “The Last Don Live” y el DVD de “The Last Don Live”.

Como no pudo asistir a su graduación de sexto grado, para que no se pusiera triste , el vocalista le dijo que su celebración era única porque él lo visitó y no todo el mundo tenía el privilegio de compartir con Don Omar.

El niño sonrió y se mostró contento con las palabras del exponente de reguetón, que viajó de Aruba a Puerto Rico sólo para el encuentro, ya que ayer, martes, partía hacia Ecuador.

En un aparte con PRIMERA HORA, Don Omar confesó que “tener a sus hijos sanos, es algo que vale más que mi fortuna y carrera musical. Encuentros como éste me han cambiado mi vida. Me gusta ayudar”.

A este tipo de actividad y compartir, agregó “tienes que llegar (con una actitud) más allá de tu bonita cara, disco y póster para convertirte en ellos”.

Durante su recorrido por otras habitaciones del cuarto piso del sanatorio, Don Omar no pudo evitar emocionarse luciendo llorozo.

Otro paciente a quien saludó fue a Johnathan Rondón Vargas, de 22 años, que es pintor y músico y padece también de leucemia.

Adán Ávila, de 15 años de edad, que está en revisión, aprovechó la ocasión para cantar a capella “Angelito” junto a Don Omar, quien le brindó su autógrafo.

“Éstos son los momentos que uno le da gracias a Dios por todas las cosas que le ha dado a uno”, acotó el intérprete que tan pronto salió del lugar se dirigió a visitar a su primogénito Daniel, de cinco años.